Sign up to see more
SignupAlready a member?
LoginBy continuing, you agree to Sociomix's Terms of Service, Privacy Policy
By continuing, you agree to Sociomix's Terms of Service, Privacy Policy
Desde que tenía 11 o 12 años recuerdo haber pasado demasiado tiempo soñando con una vida "perfecta" con la esperanza de que un día, tal vez, solo tal vez, se volviera realidad. No quiero arruinar el final, pero hasta el día de hoy esa vida que soñé todavía no existe.
Resulta que soñar despierto en exceso es una forma de escapismo y este soñar despierto tiene un nombre: soñar despierto desadaptativo .
La ensoñación desadaptativa (DM) es una actividad de fantasía extensa que reemplaza la interacción humana e interfiere con el funcionamiento académico, interpersonal o vocacional.
Durante todos estos años, nunca se me había ocurrido lo dañino y absorbente que es el ensueño constante, pero lo es incluso si eres incapaz de reconocerlo.
Aquí hay un video sobre alguien que lidia con la ensoñación desadaptativa y que brinda más detalles al respecto:
Estos son los síntomas de soñar despierto de manera desadaptativa:
Puedes confundir tus sueños con la realidad, pueden ser tan vívidos hasta el punto de que hay personajes con sus propias historias y hay toda una trama detrás de la historia.
Tus ensoñaciones pueden ser provocadas por cosas cotidianas, como algo que ves o escuchas que puede parecer normal pero que te hace empezar a soñar despierto.
Tus ensoñaciones pueden llegar a consumirte tanto que no haces las cosas cotidianas que necesitas hacer y prefieres seguir soñando despierto.
Puede resultarle difícil conciliar el sueño por la noche debido al deseo o la necesidad de soñar despierto. Para usted, puede ser más reconfortante controlar lo que sucede en sus sueños que quedarse dormido sin poder controlar lo que sucede.
Es posible que pases la mayor parte de tus días soñando despierto, porque hacer cualquier otra cosa que no sea soñar despierto puede resultarte insoportable. También puedes irritarte si alguien te interrumpe mientras sueñas despierto.
El problema es que, a medida que me hago mayor, creo que ya no tendré necesidad de escapar de la realidad, pero aún no lo he hecho. No puedo controlar cuándo empiezo a soñar despierto, se desencadena con mucha facilidad, ya sea algo que me digan o algo que vea, que puede hacerme empezar a soñar despierto al instante.
A veces puede volverse obsesivo hasta el punto en que solo puedo quedarme en mi cama soñando despierta, sin apegarme a ningún tipo de realidad. Puedo pasar días atrapada en mis ensoñaciones e ignorar por completo todo lo que ocurre en mi vida.
Cuando empecé a tomar conciencia de lo perjudicial que era mi necesidad de escapar de la realidad, tuve que preguntarme por qué. ¿De qué estaba huyendo? ¿Qué estaba tratando de evitar sentir?
Me ha llevado meses poder ser finalmente honesta conmigo misma y entender por qué siento la necesidad de escapar de mi propia realidad. Es muy simple: la vida real no es la vida estereotipada que paso horas soñando que podría ser. La vida real es caótica, dura, insoportable y me hunde en el cuerpo dejándome inmóvil e incapaz de respirar a veces.
Cuando sueño despierto puedo controlar quién soy y lo que me sucede, pero una vez que vuelvo a la realidad, todo ese control artificial desaparece. Vuelvo a un mundo en el que lo único que puedo hacer es mirar fijamente al abismo y ver cómo todo se desmorona.
Hace unos meses tuve una gran pelea con alguien que creía que me importaba mucho y eso me hizo soñar despierta. Incluso ahora, meses después, todavía me sorprendo soñando con esa persona y con todos esos escenarios poco realistas que probablemente nunca se harán realidad.
Cuando sueño con ellos, siempre ocurre una de dos cosas: o bien se trata de cómo sería si todo hubiera ido bien, de lo felices que podríamos haber sido, o sueño con mi vida, en la que me he recuperado y he seguido adelante por completo, pero todo fue solo para fastidiar a esa persona por irse con la esperanza de que se comunique conmigo y me diga cuánto lamenta haberme perdido.
Todo ese ensueño para ignorar el hecho de que me dejaron y que fue mi culpa. Y no hay forma de envolverlo con un lazo para que parezca bonito. Ellos pudieron irse ilesos y yo tuve que quedarme atrapada viviendo en mis ensueños para lidiar con todo el trauma que me dieron.
Todas estas ensoñaciones me brindan más consuelo y son mucho más amables conmigo de lo que alguna vez fueron y tal vez es por eso que nunca las abandonaré.